Es muy probable que antes de que empezara a leer este articulo no fuera la primera vez del día en la que se encontró con la palabra “aesthetic”. Es que ahora es normal verla en todos lados. Hay un aesthetic para ordenar el cuarto, estudiar, tomarse fotos, hasta sobre que cosas por comer. Pero aunque esta palabra se encuentre en la cotidianidad desde hace algunos años, va mucho más allá de un feed de Instagram, un video de tiktok y el outfit del día.
En el siglo XlX surgió el “dandy” de procedencia inglesa, surgió como una critica al “estilo victoriano” por sus diseños repetitivos, vacíos e industrializados. Se caracterizó por una fuerte atención a la estética pero centrado más en el ocio, las vestimentas bajo la apariencia de lo elegante, la belleza visual y la finura. Oscar Wilde destaca como uno de los “dandis” más importantes de la época, esto se puede ver reflejado en su obra “El retrato de Dorian Gray”. En el ensayo “Trasfondo filosófico e intertextualidad en El retrato de Dorian Gray, de Oscar Wilde” Diana María Ivizate González sostiene que: “Wilde convierte el retrato de Dorian Gray en un símbolo del arte como espejo de las acciones de los hombres. De manera que el efecto estético: el amor por la belleza física, aparece acompañado de una significación moral, a la cual seguirá la autoconciencia”.
El “dandy” se extendió hasta países como Francia pero hay una diferencia entre los ingleses y franceses, de quienes surge más adelante el esteticismo. “El comportamiento del dandy francés que caracterizó a Théophile Gautier, Baudelaire, Barbey d’Aurevilly y otros románticos llevaba implícito el intento de llamar la atención a través de la vestimenta. Esto formaba parte del proceso de teatralización de la cotidianeidad que se conceptualiza bajo el apelativo de “kaloprosopia” o “arte de la personalidad” como una característica de la dinámica existencial del artista moderno. El dandy teatralizaría la vida real en un proceso de estatización de la personalidad que abarca todas sus dimensiones, rompiendo así́ los limites entre lo que es y lo que no es arte” (G, 2020, p. 3).
Durante las dos últimas décadas del siglo XIX el movimiento esteticista (“aesthetic movement”).Surgió como la evolución de la figura del dandy. Retoma los principios que en torno al arte habían desarrollado el romanticismo francés. Básicamente este movimiento hacia “l’art pour l’art” (el arte por el bien del arte) y se trataba de encontrar la belleza en la autenticidad , la autoexpresión y la idea de construir la propia vida como arte. Finalmente este se diluyó porque se empezó de ver forma ridícula y sus representantes terminaron en otros movimientos.
En el 2011 aprecio el “vaporwave” que eran canciones, diálogos y comerciales de los 80 o 90 mezclados con sonidos de la época, eran remix con ayudas visuales, las cuales estaban recargadas con mezclas de elementos retros, estatuas griegas, caracteres japoneses, etc. A esto se le llamó aesthetic, las cuales fueron famosas en Tumblr. Así es como el termino vuelve a aparecer,junto con el estilo minimalista, la cual traía estilos de los 80 y los 90 pero ya no tan recargadas, con colores más tenues o monocromáticos y lo vintage que era la imitación de lo retro, acompañado de elementos de la naturaleza.

Hoy en día, se puede ver replicas de estas ideas pero de una manera mucho más superficial. Debido a la gran cantidad de contenido que consumimos diariamente se podría decir que los jóvenes tenemos la presión de ser “aesthetic” en todas las actividades que realizamos. Queremos llegar a la vida ideal y “diferente” que tanto vemos en los demás cuando entramos a Instagram, tiktok, Pinterest, etc. Algunos pueden caer en el error de pensar que al imitar lo que el otro tiene o lo que el otro consume es la solución, por lo que suben cosas a redes sociales que no los representa o terminan comprando cosas como por ejemplo las luces led en la habitación, los jeans bota campana, un tote bag, o la típica foto de la hora con los números angelicales en el celular, pensando que eso es ser espiritual, ya que hoy en día ser espiritual es ser aesthetic. Al paso que vamos no me extrañaría que el día de mañana me aparezcan videos de “como barrer de manera aesthetic”.

Igual no todo recae en las manos de los jóvenes, las marcas y los medios de comunicación lo saben y se aprovechan de eso, no crean que es causalidad salir a comprar ropa y darnos cuenta de que no importa a donde vayamos, todos estamos compramos lo mismo con la falsa idea de que estamos siendo diferentes. Pueden realizar el ejercicio de entrar a YouTube y simplemente colocar en el buscador la palabra en cuestión y se encontraran con cosas como: “el filtro que uso para que mi ig se vea aesthetic”, “cosas que debes tener para verte aesthetic” y “tiendas que venden ropa aesthetic” y así, es como todos terminamos ofreciendo y consumiendo más de lo mismo, ¿no les parece curioso?. Ahora bien, si el movimiento buscaba la autenticidad por medio del autoconocimiento ¿Cómo fue que se perdió el sentido del mismo?
Es necesario aclarar que no esta mal seguir tendencias, si realmente te gustan y te encuentras cómodo con lo “aesthetic” eso esta perfecto, pero quizá muchos se esconden detrás de esto por el miedo que puede producir la autenticidad. Nos hemos acostumbrado a terminar un día, encerrarnos en el cuarto y compartir la noche con sensaciones de vacío e insuficiencia, probablemente porque nos comparamos con la información que constantemente nos bombardea, que dice cosas como: “los 10 pasos que debes seguir si quieres ser aesthetic y tener tu glow up”, “la música que debes escuchar si quieres ser aesthetic”. Buscamos tanto afuera la felicidad que ni siquiera pensamos en detenernos, mirar dentro de nosotros y preguntarnos que es lo que quiero yo de mi, que se siente bien para mi y quien quiero ser. Si seguimos intentando llenar las expectativas de lo que se espera que seamos, quizá ese es el motivo por el que podemos sentirnos tan perdidos al vivir la vida, porque prácticamente la estamos viviendo para los demás.
Ser vulnerable frente a lo que nos gusta implica valentía pero ¿no creen que es mucho mas gratificante vivir la vida como verdaderamente queremos?. Los griegos estuvieron en la búsqueda constante de la belleza y esto se vio reflejado en su forma de percibir la vida, veían a la misma como una forma de arte, “El arte (del latín ars, artis) es entendido generalmente como cualquier actividad o producto realizado con una finalidad estética y también comunicativa, mediante la cual se expresan ideas, emociones y, en general, una visión del mundo, a través de diversos recursos”. Foucault llamó a esto “la estética de la existencia” . Era la moral que regia a los griegos pero esta no calificaba las acciones como buenas o malas, sino lo que dibujaban o narraban de la personalidad del individuo, el reflejo de lo que eres se encuentra en el como y no en el que, básicamente, no eres lo que haces sino como lo haces. Pero los griegos sabían que para vivir una vida desde el fenómeno artístico, era necesario cuestionarse, examinarse para lograr entender el quienes somos y el porque hacemos lo que hacemos, quizá no con la necesidad de tener una respuesta certera pero si disfrutando del placer que da el conocimiento de uno. La belleza de vivir exige ese dialogo interno para experimentar la coherencia con lo que pienso, siento, digo y hago.
Entonces artista no es solo el que pinta, baila, canta o toca un instrumento, en ese sentido todos seriamos artistas y eso se ve reflejado en que tipo de vida queremos narrar, dibujar. La vestimenta es arte, la manera de hablar, de actuar, en como podemos encontrar la belleza de la vida cotidiana y saber que la belleza no se puede describir con exactitud. Podemos hacer de nuestra vida una gran obra de arte, no hay métodos, no hay una lista de 10 pasos a seguir no hay maneras exactas de hacerlo, solo nosotros frente a un gran escenario o un lienzo. Ese es el arte de vivir.
La diferencia entre la sociedad de hoy en día con los ingleses y franceses del siglo XlX y los griegos, es el sistema, que ha encontrado la forma de industrializar un tipo de vida y nos han engañado lo suficiente para que creamos que es el único tipo al que debemos aspirar si queremos ser felices, el verdadero reto al que nos enfrentamos ahora es tener la valentía de diseñar y vivir la vida que deseamos desde la autenticidad. Entonces podríamos cuestionarnos cosas como: ¿Quiénes seriamos si no tuviéramos miedo al autoconocimiento?
Referencias:
G, S. (2020). https://medwinpublishers.com/NNOA/NNOA16000183.pdf. Nanomedicine & Nanotechnology Open Access, 5(2). https://doi.org/10.23880/nnoa-16000183
https://victorianweb.org/espanol/autores/wilde/dawson14.html
Comments